En 1999, Rick Levine, Doc Searls, Christopher Locke y David Weinberger escribieron el Manifiesto Cluetrain, una lista de 95 tesis sobre como Internet había cambiado para siempre las relaciones entre consumidores y compañías.
Lo sorprendente del manifiesto no es que los conceptos e ideas que propone sigan siendo validas y vigentes hoy en día sino que, 14 años después de su publicación, aún hay compañías que no se han dado cuenta.
Internet no sólo no ha deshumanizado nuestro mundo sino que ha dado más poder a las personas, que ya no se limitan a consumir pasivamente la publicidad de las empresas, sino que interactuan con la misma.
El manifiesto es revolucionariamente obvio -«El mercado está compuesto por seres humanos no de sectores demográficos«- y asume por primera vez las consecuencias de la adopción de una tecnología que ha cambiado el mundo para siempre: «Los hiperenlaces han acabado con las jerarquías de contenidos«.
[no_blockquote text=»Internet ha cambiado la forma en la que las empresas deben dirigirse a sus clientes. Puedes aceptarlo o puedes obviarlo, pero no puedes evitarlo» text_color=»» title_tag=»h4″ width=»» line_height=»» background_color=»» border_color=»» show_quote_icon=»yes» quote_icon_color=»» quote_icon_size=»»]
Las 95 tesis son una referencia clara a las 95 tesis que Lutero clavó en la puerta de la iglesia de Wittenberg, dando origen a un debate teológico que desembocó en el nacimiento del protestantismo.
Estas 95 tesis son públicas y están disponibles gratuitamente en Internet. En el año 2000, los mismos autores publicaron un libro en el que elaboraban y explicaban las ideas del manifiesto.
Internet ha cambiado nuestro mundo para siempre y, por supuesto, también la manera en la que las empresas pueden y deben dirigirse a sus clientes. Puedes aceptarlo o puedes obviarlo, pero no puedes evitarlo.